martes, 23 de abril de 2013

QUE PIENSO O.....


NOTAS:
¿Qué son los eones?: Los eones son los períodos en los que se encuentra dividida la historia de la Tierra desde el punto de vista geológico y paleontológico. Equivalen a mil millones de años. Equivale a un determinado período paleontológico.
         ¿Qué es el Pléroma?: Se define como la unidad primordial de la que surgen el resto de elementos que existen o, dicho de otra forma, la plenitud. Es, pues, un término relevante a la filosofía y la religión.


Qué pienso o entiendo sobre Dios


Es el “Gran Espíritu invisible”; es el Padre-Madre cuya esencia es el SER [cuyo nombre es incomprensible e impronunciable]; es la Luz [conocimiento]; es luz de la luz de los eones [desde antes de todos los tiempos]; es la luz del silencio del Presilencio y, es la luz del silencio del Prepensamiento; es la luz de la Palabra y de la Verdad. Es el conocimiento de sí mismo y es Padre-Madre del silencio, del vacío y del caos.
Resplandor a partir del Eón [luz] de los eones de luz del Padre, es la luz sin límite; el Autoengendrado, luz del Padre inmanifestado, el Autoproducido, el verdaderamente verdadero.
El Gran Espíritu es: la esencia del Ser, luz del conocimiento, luz del Presilencio, del Prepensamiento y la Luz del Verbo.
Antes de todos los tiempos y a partir del Silencio del SER (Padre) inmanifestado u oculto hasta entonces; de Él han provenido tres manifestaciones o poderes, 1º del silencio viviente, el “Padre”, 2º por la encarnación del Verbo el “Hijo” y 3º el “Espíritu Santo” indisoluble que procede de la misma indisolubilidad del Padre con el Hijo. De esta triada o Trinidad se puede afirmar que es la esencia del SER, del Yo Soy.
Al no existir género en el SER se le puede llamar Padre-Madre, Padre o simplemente Madre, pues en la esencia del SER está todo, es la Matriz de todo cuanto existe.
Se puede decir que Dios es la respiración de la vida, la fuente del sonido, la acción sin palabras, el Creador del cosmos.

Puedo añadir que: Sobre la existencia de Dios no puedo decir que tengo una sugestión mental. La idea de un ser omnipresente, omnisciente, omnisapiente, totalmente perfecto. Dentro de mí que soy un ser débil e imperfecto, porqué lo más perfecto no sale de lo menos perfecto... es la idea del ser totalmente perfecto, tal idea no me la puedo haber dado a mí mismo por tanto, me ha sido dada por Dios de un modo innato. Como Dios es un ser totalmente veraz el mundo no puede ser un engaño. . Luego Dios existe.
Nos es imposible poder ver de un modo directo la naturaleza de Dios con la razón al carecer de un concepto exhaustivo, cuya esencia es el Ser. Concibo un Ser supremo del que depende todo cuanto ha sido creado.
A la realidad material acudo primeramente ya que es la que puedo ver de un modo patente y, luego me remonto a su última causa. Si pensara que esta idea o noción de Dios es independiente del mundo, estaría en un error.
A la afirmación de Chesterton de que el mundo es como una novela ……... es mucho más. No puedo hacer real todo lo que pienso pero, en Dios existe una identidad entre su Ser y su Pensamiento; es decir: puede llevar al plano de la realidad lo que piensa. La creación no es el pensamiento de Dios, pero tampoco es independiente de él.
Por qué es imposible demostrar la existencia de Dios. Según su filosofía Kant piensa que “sólo llegamos a los fenómenos de la realidad, pero no a la realidad en sí misma”.
Entre Dios y su creación existe una relación que mantiene en el ser a la creación; Como la luz da claridad a las aguas de un lago, claridad que no se moja... De Dios depende la creación, pero no es circunstancial a él.

martes, 16 de abril de 2013

VALDEPEÑAS DE JAEN


VIDEO DE VALDEPEÑAS DE JAEN






VALDEPEÑAS DE JAEN

domingo, 14 de abril de 2013

EL ESCUDO DEL PAPA


EL ESCUDO DEL PAPA Y LA MISERICORDIA DE DIOS



Publicado por: Félix Martínez Cabrera


El nuevo escudo papal, casi igual que cuando era Arzobispo de Buenos Aires, prevé el cambio de la estrella, que en vez de 5 puntas tiene 8, para simbolizar las 8 bienaventuranzas. Modifica la flor de nardo, que representa a San José, patrono de la Iglesia universal. Aparece el símbolo de los jesuitas JHS, que se mantiene como estaba. La estrella simboliza a la Virgen, Madre de Cristo y de la Iglesia, mientras la flor de nardo simboliza a San José, patrono de la Iglesia universal (son las grandes devociones y preferencias del Papa).

         El lema de Papa es éste: Según el pasaje completo del Evangelio -“Jesús vio a un hombre, llamado Mateo, sentado ante la mesa de cobro de los impuestos, y le dijo: Sígueme”. Ante los comentarios de los publicanos y recaudadores de impuestos, que no entiende que llame a un pecador, Jesús les dijo: “Id y aprended que significa prefiero la misericordia al sacrificio”.(Mt.9, 16)) Con ello les recrimina muy finamente que Dios prefiere la misericordia a los sacrificios de la antigua ley, ya que la salvación del hombre viene de Dios, y no de la ley.

          El Papa partiendo de este texto evangélico, usa como lema de su pontificado las palabras “Miserando atque eligendo”,que proceden de un pasaje de de San Beda el Venerable, comentando el relato evangélico de la vocación de San Mateo; las traduce en un latín decadente por “miserando atque eligendo”, esto es, teniendo misericordia, lo eligió y Mateo lo siguió. Con este simbolismo indica la llamada de Dios a los 17 años, y si ingreso en la compañía de Jesús. Es significativo el hecho de que al aceptar el pontificado dijera estas palabras: “Soy un gran pecador, confiando en la misericordia y paciencia de Dios y en el sufrimiento, acepto.”

Por este motivo la palabra misericordia estaba muy gravada en él. Tal vez sea la palabra que más ha repetido en este mes de pontífice, casi siempre unida a la palabra amor. Dios es amor y misericordia. La palabra perdón esta unida al amor misericordioso de Dios. La cruz de Cristo encierra esta dimensión, ya que la cruz es símbolo de "amor, misericordia, perdón y también justicia”. “La misericordia de Dios es tan fuerte que hace florecer hasta la tierra más árida, puede hacer revivir incluso a los huesos secos” (Ez.37,1.14).

“Dejémonos renovar por la misericordia de Dios, dejémonos amar por Jesús, dejemos que la fuerza de su amor trasforme también nuestras vidas, y hagámonos instrumentos de esta misericordia, cauces a través de las cuáles Dios puede regar la tierra, custodiar toda la creación y florecer las justicia y la paz”. “La misericordia trasforma nuestras vidas”. La misericordia nace del corazón, y es ternura, afecto, alegría, gozo y sonrisa. “Dios nos vence con su misericordia”, nos llama y nos enseña el camino, que da sentido a nuestra vida. Lo contrario es el odio, el rencor, la venganza. En la palabra del hijo pródigo, Dios es amor porque va a su encuentro, Dios es misericordia porque perdona, Dios es compasivo, porque limpia las lagrimas del hijo que llora. Su misericordia se manifiesta en que Dios es comprensivo, paciente, siempre está a la espera. En que siembra misericordia, recoge la luz, nos trae la paz, y nos hace vibrar con su ternura.
            Para el Papa “Tomás reconoce su propia pobreza, su poca fe: “‘Señor mío y Dios mío’: con esta invocación simple, pero llena de fe, responde a la paciencia de Jesús. Se deja envolver por la misericordia divina, la ve ante sí, en las heridas de las manos y de los pies, en el costado abierto, y recobra la confianza. Es un hombre nuevo, ya no es incrédulo sino creyente”.
           
 “Dios nos espera siempre, aún cuando nos hayamos alejado. Él no está nunca lejos, y si volvemos a Él, está preparado para abrazarnos”. Hay también una reciprocidad: “Sed misericordiosos, como vuestro Padre”(Mt.6, 36).” Dios es compasivo y misericordioso, tardo a la ira y rico en amor y fidelidad” /Ex.34, 6). Dios se compadece del hombre y lo perdona (Is.55, 7). La misericordia está unida a la gracia (Heb.4, 16). No es un puro sentimentalismo, sino que tiene que traducirse en obras:”Sé tú también misericordioso”(Lc. 10, 37). En castellano hay una cascada de palabras muy parecidas, que nos hacen descubrir los muchos matices que tiene este vocablo: Amor, compasión, alegría, paz, clemencia, humanidad, ternura, perdón, justicia, gracia etc.
El hombre es un ser que conoce y puede comprender los misterios del mundo. Jesús es el centro del cristianismo, a quien tenemos que conocer y amar, pero hay una exigencia fundamental en la vivencia cristiana, que se reduce a estas palabras amar y comportarse misericordiosamente, ya que Dios es amor y Dios siempre perdona. El salmo nos enseña como tenemos que orar.
            «Dad gracias al Señor porque es bueno, / porque es eterna su misericordia. Diga la casa de Israel: “Eterna es su misericordia” (Sal 117,1-2


Publicado por Félix Marca en 03:46 

sábado, 6 de abril de 2013

QUIERO DARME EN AMORES


QUIERO DARME EN AMORES  

(Extraído de: Meditación de un amanecer en tiempo de sementera. de JOSÉ MARÍA PEMÁN)
Hacia final de 1.966, estando yo como hermano lego de la orden Carmelita de la antigua observancia, en la Parroquia del Cristo de la Fe  cita en Calle de los Misterios de Madrid, viendo y pensando en el futuro que me esperara ya que en nada satisfactoria mis inquietudes espirituales.
Durante unos ejercicios espirituales cayo en mis manos esta poesía cuyo primer párrafo reflejaba mi situación,  entonces, decidí abandonar la orden a cambio de hacer realidad el resto, viviendolo con el mayor sentido de amor y entrega hacia los demás  pero desde fuera del claustro conventual; finalmente a primero de Enero abandone la orden Carmelitana.


La vida que no florece
y es estéril y escondida,
y ni fecunda ni crece,
es vida que no merece
el santo nombre de vida.

Quiero darme en amores
cuanto mi espíritu encierra,
y deshacerme en sudores
para que, al dar en la tierra
produzca la tierra flores.

¡Alma da cuanto poseas,
hasta las últimas sobras!
¡Tú voluntad, date en obras!
¡Tú inteligencia, en ideas!

Este alma mía abrasada
en un anhelo encendido,
no ha de ser grano perdido
en los bordes de la arada.

Que es verdad que, aunque haya quien
nunca lograra entenderlo,
hay un goce en hacer bien
por sólo el goce de hacerlo.

Y es que al que siembra esté suelo
de rosas y poesías de esperanzas, 
de alegrías de fortaleza y consuelo;
y al que le da a sus hermanos
rosas de consejos sanos
y palabras bondadosas...

¡Le queda siempre en las manos algún
perfume de rosas!

Y al fin rendido quisiera
poder decir cuando muera;
Señor, yo no traigo nada
de cuándo te amor me dieras.
Todo lo dejé en la arada
en tiempos de sementera!

Allí sobre mis ardores
vuelve tus ojos allí,
que allí he dejado unas flores...
de consuelos y de amores
¡y ellas te hablarán de mi!

PADRENUESTRO

PADRENUESTRO

Padre madre, respiración de la vida, fuente del sonido, acción sin palabras, creador del cosmos,.....

Haz brillar tu luz dentro de nosotros, entre nosotros, y fuera de nosotros, para que podamos hacerla útil,

Ayúdanos a seguir nuestro camino respirando tan sólo el sentimiento que emana de ti,......

Nuestro yo, en el mismo paso, pueda estar con el tuyo, para que caminemos como reyes y reinas, con todas las otras criaturas,..

Que tu deseo y el nuestro sean uno solo, en toda la luz, así como en todas las formas, en toda existencia individual, así como en todas las comunidades,....

Haznos sentir el alma de la tierra dentro de nosotros, pues de esta forma sentiremos la sabiduría que existe en todo. ....

No permitas que la superficialidad y la apariencia de las cosas del mundo nos engañen,....  Y nos libere de todo aquello que impide nuestro crecimiento,....

No nos dejes caer en el olvido de que tú eres el poder y la gloria del mundo, la canción que se renueva de tiempo en tiempo, y que todo lo embellece,....

Que tu amor este solo, donde crecen nuestras acciones.

Que así sea.






 (copiado de una inscripción en arameo sobre una piedra de mármol encontrada en Jerusalén).,

viernes, 5 de abril de 2013

SALIR A LA PERIFERIA





SALIR A LA PERIFERIA

Me fascinó la primera vez que el Papa dijo que teníamos que salir a la periferia. Era una palabra sugerente. Periferia era lo que está fuera del centro. Para el diccionario de la real academia es “un espacio que rodea un núcleo cualquiera. Quedaba claro que había que salir del núcleo hacia fuera. Rastreando el pensamiento del papa en otro escrito antes de ser Papa (el Jesuita) decía: “Creo que una Iglesia que se reduce a lo administrativo, a conservar su pequeño rebaño, es una Iglesia que, a la larga, se enferma. El pastor que se encierra no es un auténtico pastor de ovejas, sino un "peinador" de ovejas, que se pasa haciéndole rulitos, en lugar de ir a buscar otras”. El mismo Papa, entonces Jorge Badoglio en el mismo libro cuenta esta escena del entonces Cardenal Roncalli: “Siendo patriarca de Venecia, solía bajar a las 11 a la plaza de San Marcos a cumplir con el llamado "rito de la sombra", que consiste en ponerse a la sombra de un árbol o de un tabique de los bares y tomarse un vasito de vino blanco y conversar unos minutos con los parroquianos”. Vivir en la periferia, por tanto,  es salir de la sacristía,  de los despachos y de las Iglesias. Salir a la periferia donde está la pobreza y la miseria. Salir a las calles, donde todo son navajazos y sangre. Buscar a los que no creen y darles la mano. Abrazar a los que no piensan como nosotros.  Visitar a los enfermos que sufren y lloran, y limpiarle sus lágrimas. Visitar a los viejos solitarios, que nadie los quiere. Ir por el mundo como Francisco de Asís deseando la paz a todos los hombres de buena voluntad. Anunciar en todas las esquinas, que todos los hombres sin diferencia de raza y religión somos hermanos. Es anunciar al Cristo sufriente, que aún está con nosotros y vive entre nosotros. Salir a la periferia es decirles que Cristo nos ha traído el "amor, misericordia, perdón y justicia”. Es “cargar con sus penas y alegrías y esperanzas”. Ser tolerantes con los que viven en un mundo distinto del nuestro. “Hay que salir a experimentar nuestra unción, su poder y su eficacia redentora y acercarse a “periferias donde hay sufrimiento, hay sangre derramada, ceguera que desea ver, donde hay cautivos de tantos malos patrones”.

 Es difícil salir de nuestro mundo interior. Nos sentimos muy a gusto en nuestro sillón, estamos muy instalados en nuestras rutinas y en nuestro confort. Nuestro trabajo es sentir como Cristo.” El que no sale de sí, en vez de mediador, se va convirtiendo poco a poco en intermediario, en gestor. Todos conocemos la diferencia: el intermediario y el gestor «ya tienen su paga», y puesto que no ponen en juego la propia piel ni el corazón, tampoco reciben un agradecimiento afectuoso que nace del corazón. De aquí proviene precisamente la insatisfacción de algunos, que terminan tristes y convertidos en una especie de coleccionistas de antigüedades o bien de novedades, en vez de ser pastores con «olor a oveja», pastores en medio de su rebaño, y pescadores de hombres”. Que bella la frase con olor a oveja, ya que el pastor que está al frente de ellas, las acompaña y defiende y huele como ellas.

“El Buen pastor “sale de la misa con cara de haber recibido una buena noticia. Nuestra gente agradece el evangelio predicado con unción, agradece cuando el evangelio que predicamos llega a su vida cotidiana, cuando baja como el óleo de Aarón hasta los bordes de la realidad, cuando ilumina las situaciones límites, «las periferias» donde el pueblo fiel está más expuesto a la invasión de los que quieren saquear su fe. Nos lo agradece porque siente que hemos rezado con las cosas de su vida cotidiana, con sus penas y alegrías, con sus angustias y sus esperanzas. Y cuando siente que el perfume del Ungido, de Cristo, llega a través nuestro, se anima a confiarnos todo lo que quieren que le llegue al Señor: «Rece por mí, padre, que tengo este problema... son la señal de que la unción llegó a la orla del manto, porque vuelve convertida en petición. Cuando estamos en esta relación con Dios y con su Pueblo, y la gracia pasa a través de nosotros, somos sacerdotes, mediadores entre Dios y los hombres. Lo que quiero señalar es que siempre tenemos que reavivar la gracia e intuir en toda petición, a veces inoportunas, a veces puramente materiales, incluso banales - pero lo son sólo en apariencia - el deseo de nuestra gente de ser ungidos con el óleo perfumado, porque sabe que lo tenemos. Intuir y sentir como sintió el Señor la angustia esperanzada de la hemorroisa cuando tocó el borde de su manto. Ese momento de Jesús, metido en medio de la gente que lo rodeaba por todos lados, encarna toda la belleza de Aarón revestido sacerdotalmente y con el óleo que desciende sobre sus vestidos. Es una belleza oculta que resplandece sólo para los ojos llenos de fe de la mujer que padecía derrames de sangre. Los mismos discípulos - futuros sacerdotes - todavía no son capaces de ver, no comprenden: en la «periferia existencial» sólo ven la superficialidad de la multitud que aprieta por todos lados hasta sofocarlo (cf. Lc 8,42). El Señor en cambio siente la fuerza de la unción divina en los bordes de su manto”.
         "Así hay que salir a experimentar nuestra unción, su poder y su eficacia redentora: en las «periferias» donde hay sufrimiento, hay sangre derramada, ceguera que desea ver, donde hay cautivos de tantos malos patrones. No es precisamente en autoexperiencias ni en introspecciones reiteradas que vamos a encontrar al Señor”…
“El sacerdote que sale poco de sí, que unge poco - no digo «nada» porque nuestra gente nos roba la unción, gracias a Dios - se pierde lo mejor de nuestro pueblo, eso que es capaz de activar lo más hondo de su corazón presbiteral. El que no sale de sí, en vez de mediador, se va convirtiendo poco a poco en intermediario, en gestor. Todos conocemos la diferencia: el intermediario y el gestor «ya tienen su paga”,

Para terminar quiero citar unas palabras de Benedicto XVI, que me impresionaron cuando las leí hace tiempo y tienen relación con lo dicho: “En la Iglesia la atmósfera resulta irrespirable si los portadores del misterio olvidan que el sacramento no es un reparto de poderes, sino una expropiación de sí mismo a favor de Aquel en nombre del cual debo hablar y obrar. Donde a la mayor responsabilidad corresponde la mayor autoexpropiación, allí nadie es esclavo de los demás, allí domina el Señor, y por eso vige el principio de que “el Señor es el espíritu, y donde está el espíritu allí está el Señor”(La Iglesia, Paulinas, 91, 87).




Publicado por Félix Marca en 07:33 

COMO EL VIENTO

COMO EL VIENTO

A ofrecerte Señor vengo,

mi ser, mi vida, mi amor,

mi alegría, mi dolor,

cuanto puedo y cuanto tengo,

cuanto me has amado,  Señor.




Desde mi inexperiencia en la construcción de Blog, me he decidido a recoger en este, las peripecia en mi caminar por el sendero de luz y amor de Nuestro Señor.
Recopilaré datos que poseo y de los que vallan saliendo. 

NOTA: A aquellos que puedan o quieran leer los mismos, he de decirle que están hecho desde lo más intimo, no trato de hacer ninguna obra literaria o devocionario sino, comentar las alegrías y las penas de cualquier peregrino por alcanzar la meta para la cual fuimos creados.
Otras NOTAS: El que suscribe tiene 70 años, casado, 4 hijas/os y 8 nietos/as, estudios primarios, no pertenezco a ninguna organización, pero me atrae la mística e intento vivirla.

Por fin he acabado de configurar mas o menos el Blog a mi gusto, esto quiere decir que iré agregando temas.

GRACIAS