Tú eres mi luz
23-09-2016
Señor, llevo
todo este mes aguado, sin ganas de hacer nada, la pereza invade mi ánimo,
existe como una inercia de repulsión hacia todo esfuerzo. Una vez más me siento
encajonado en este cuerpo que solo desea estar desparramado y enredado en todo aquello
que satisface a los sentidos.
Yo esperaba
que, cada día todo fuese más sencillo y agradable pero, nada es así, cada día
que pasa todo se torna más escurridizo, áspero o dificultoso, es como si la
experiencia vivida no valiera para nada. La noche aciaga una vez más a caído
sobre su presa. No sé cuánto ha de tardar la alborada cargada de brisa fresca oliendo
a jazmín y nardos, un nuevo amanecer impregnado por esa luz que nos envuelve y
nó deslumbra.
Ven Luz divina,
aunque aún no me siento preparado, estoy dispuesto a abrazarte, todo mi ser
esta sediento de Ti. Sé que en este caminar, aunque en ocasione me sienta
invadido por la soledad y el desánimo, Tú estás allí, eres mi baluarte y mi
roca, pero a pesar de todo, vuelve a acariciar mis sentidos e inundar de amor
mi corazón, no tarde Señor, soy de ánimo frágil y no quisiera volver a
defraudarte una vez más.
Sé que las
caídas no te importan, pero sí mucho el esfuerzo en levantarse y proseguir
caminando hacia Ti, a pesar de nuestras debilidades, Señor, tu nos ama, no
permitas que por nuestra insensatez nos apartemos de Ti.
Sé
que en estos momentos para mí, es noche aciaga pero, la luz, Tu Luz está ahí y
no existen noches por muy aciaga que sean, jamás podrán suplantar tu Luz, esta
es mi fortaleza y mi esperanza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario