A MARIA
06-12-2016 (soneto)
La más tierna y pura flor desposada,
el justo, obediente y virtuoso aceptó.
Hecho verbo, cielo y tierra se fundió,
ahora, la promesa está cumplida.
Con amor la infancia cubrió de gloria,
en silencio caminó tras sus pasos.
Gozó su vida y, sufrió su calvario,
con todo, Tú ere la llena de gracias.
Como madre y corredentora haces,
desde el cielo intercedes por tu pueblo,
de la iglesia protectora y lumbrera.
Lucero y estrella de la mañana eres,
Maria es proclamada Inmaculada,
hoy por madre hermosa la tengo.
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