Capítulo 12 La mujer y el dragón

La mujer y el dragón

APOCALIPSIS, CAPÍTULO 12

12:1 Apareció en el cielo una gran señal: una mujer vestida del sol, con la luna debajo de sus pies, y sobre su cabeza una corona de doce estrellas.

La luna nos da luz reflejada del sol, así es Maria refleja la luz de Cristo representada en esa luna bajo sus pies. Maria es la matriz de donde salió el cuerpo de Cristo y dando al redentor el linaje de su pueblo representado por las doce tribus de Israel (12 estrellas).

12:2 Y estando en cinta, clamaba con dolores de parto, en la angustia del alumbramiento.

Mujer a punto de parir y angustiada por ese momento, llena de temor por el hijo que va a dar a luz.

12:3 También apareció otra señal en el cielo: he aquí un gran dragón escarlata, que tenía siete cabezas y diez cuernos, y en sus cabezas siete diademas;

Dragón (rojo intenso) es el maligno en todo su apogeo

12:4 y su cola arrastraba la tercera parte de las estrellas del cielo, y las arrojó sobre la tierra. Y el dragón se paró frente a la mujer que estaba para dar a luz, a fin de devorar a su hijo tan pronto como naciese.

El dragón arrastra a poderes terrenales para impedir (se paró a fin de devorar al hijo en cuanto nazca) que nazca el Redentor.

12:5 Y ella dio a luz un hijo varón, que regirá con vara de hierro a todas las naciones; y su hijo fue arrebatado para Dios y para su trono.

La mujer dio a luz y marcho lejos para que no le hicieran daño al niño.

12:6 Y la mujer huyó al desierto, donde tiene lugar preparado por Dios, para que allí la sustenten por mil doscientos sesenta días.

Maria huyó con el niño a Egipto durante 3’5 años según las escrituras 1260/360 = 3’5

12:7 Después hubo una gran batalla en el cielo: Miguel y sus ángeles luchaban contra el dragón; y luchaban el dragón y sus ángeles;

Lucha entre el bien y el mal. Miguel es la Ley y cabeza de los luchadores por el bien, y Satanás es el destructor de la Ley y cabeza de los que luchan por imponer la desobediencia.

12:8 pero no prevalecieron, ni se halló ya lugar para ellos en el cielo.

No prevaleció la destrucción de la Ley, en el cielo no hay lugar para ellos. La Ley se cumplió.

12:9 Y fue lanzado fuera el gran dragón, la serpiente antigua, que se llama diablo y Satanás, el cual engaña al mundo entero; fue arrojado a la tierra, y sus ángeles fueron arrojados con él.

Al ser arrojada a la tierra la antigua serpiente (Satanás), quedó sujeto bajo los pies de la mujer (Maria y del fruto de su vientre).

12:10 Entonces oí una gran voz en el cielo, que decía: Ahora ha venido la salvación, el poder, y el reino de nuestro Dios, y la autoridad de su Cristo; porque ha sido lanzado fuera el acusador de nuestros hermanos, el que los acusaba delante de nuestro Dios día y noche.

En este versículo se anuncia la venida del redentor. Al nacer Cristo, ha venido la salvación y el reino de Dios, los que luchan y vencen con Cristo no serán acusado delante del Señor.

12:11 Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte.

La sangre del Cordero y su palabra, han vencido a aquellos que menospreciaron sus vidas.

12:12 Por lo cual alegraos, cielos, y los que moráis en ellos. ¡Ay de los moradores de la tierra y del mar! porque el diablo ha descendido a vosotros con gran ira, sabiendo que tiene poco tiempo.

El diablo esta suelto en la tierra por un breve tiempo, nuestra salvación nos viene por la sangre de Cristo.

12:13 Y cuando vio el dragón que había sido arrojado a la tierra, persiguió a la mujer que había dado a luz al hijo varón.

Satanás ha perseguido y persigue a los hijos de la tierra (Maria, la iglesia, la desposada, etc.) y coherederos del Cordero, que serán justificados por su sangre.

12:14 Y se le dieron a la mujer las dos alas de la gran águila, para que volase de delante de la serpiente al desierto, a su lugar, donde es sustentada por un tiempo, y tiempos, y la mitad de un tiempo.

Las alas son medios para desplazarse y retirarse al desierto (a la oración) para no caer en tentación contra la Ley.

Por un tiempo (= 1 año), y tiempos (= al doble de un tiempo 2 años), y la mitad de un tiempo (= medio año), el año judío constaba de 360 días, el resultado final es 360x3=1080+180=1260 días, tiempo que estuvo Jesús, José y Maria huidos en Egipto.

12:15 Y la serpiente arrojó de su boca, tras la mujer, agua como un río, para que fuese arrastrada por el río.

El agua significa pasión, un rio de agua es un rio de pasiones que pueden arrastrar a la perdición al que no esta vigilante, pero la mujer (la madre) se apartó de los peligros.

12:16 Pero la tierra ayudó a la mujer, pues la tierra abrió su boca y tragó el río que el dragón había echado de su boca.

La tierra (la madre) ayudó a la mujer (Maria), la distancia (Tierra) y como el dicho: “Pareció que la tierra se la tragó”, y el enemigo satanás (Herodes) fue burlado.

12:17 Entonces el dragón se llenó de ira contra la mujer; y se fue a hacer guerra contra el resto de la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo.

El dragón (Satanás) se lleno de ira contra la mujer y  contra su descendencia (su iglesia), los que guardaron la voluntad de Dios y tienen el testimonio de la sangre del Cordero.