AQUÍ ESTOY

Aquí estoy

31-03-2014

Despertar

Aquí estoy como siempre pero, no siempre se está en plenas condiciones como para  darte gracias y alabar tu Santo Nombre como es menester, hoy es un día en el cual viene a mi memoria los dones recibidos y la indiferencia o mejor dicho, la insensibilidad con la cual los he recibido, sabía que eran gracias o favores pero mi corazón estaba adormecido por las inquietudes del día a día.

Hoy he caído en la cuenta de que “el que no es agradecido, no es de ser bien nacido”. Incluso  las grandezas de los hechos fueron recibidas como si en esos momentos yo estuviese adormecido, ahora después de digerirlos un poco, empiezo a ser consciente de mi torpeza y del valor de lo recibido.

No se deben exigir los regalos

Aunque no tengo palabras para expresar lo visto y percibido durante gran parte de mi vida, he deseado últimamente e inconscientemente el que se repitan alguno de los hechos, sin darme cuenta que son regalos y no ah derecho a pedir o esperar duplicados.

Puesto a pensar sobre los favores recibidos, tampoco es gran cosa ya que, al meditar sobre ellos no son nada portentoso de la realidad, ya que son débiles reflejos de una realidad inimaginable e inabarcable o incomprensible, ni siquiera de forma parcial.

Desbordamiento dimensional

Esto me esta dando a pensar que todas las cosas tienen sus reglas, religiones, gobiernos u organizaciones etc., para su buen funcionamiento son necesarias reglas de organización y comportamiento, pero cuando nos metemos en estos “lares”, aquí no ah lugar a reglas, calidad, longitud u otras dimensiones o a que comparar, de ahí ese desconcierto hasta poder ir digiriendo ver lo que los ojos no pueden ver ni, oír lo que los oídos no pueden percibir.

Y máxime cuando empieza a conocerte y a conocer, entonces te das cuenta de lo que son las cosas y de lo que eres, de la grandeza de Dios, de lo mucho que el te aprecia y de la poca estima que de ti tu tienes.

Cuando te das cuenta del amor que le tienes a Dios y de la necesidad de amar a los seres que fueron como tu creados y de como él te ama a ti y a ellos, entonces un escalofrío recorre tu cuerpo.

Cuando te haces consciente de tu debilidad y empieza a comprender las debilidades de los demás, ya no puedes hacer juicio ni condenar a nada ni a nadie, es el amor lo que nos mantiene.

Perdón y misericordia

Si Dios te perdona todas tus debilidades y te invita a seguir luchando sin desfallecer y siente una voz interior que te dice: no mires ni pienses en tus caídas, no pierdas tiempo y levántate prosiguiendo el camino, levántate inmediatamente y dirige todo tu esfuerzo en seguir caminando hacia Dios, no pares, sigue aunque millones de veces caiga, levántate y mira y encamínate a Dios, el no cuenta tus caídas sino el esfuerzo que pongas en seguir sus pasos, el no te condena por tus caídas, el premia y agradece tus esfuerzo, porque, nadie excepto Él es perfecto.

No juzgues a nadie y piensa que los defectos que tu ve en las demás son tus propios defectos, y si él los permite y los tolera ¿Quién eres tú para no perdonar y ser intransigente?.

La paz

Relaja cuanto pueda tu cuerpo y mente, para buscar o alcanzar momentos de lo que yo le llamo fracciones de paz luminosa, donde sin esfuerzos ni pronunciar palabras, entiende, percibes, ve y oyes, “mi paz te doy, mi paz te dejo” la vive y la masca, voz que percibe sin salir de boca alguna, vidas y formas diferentes que sin conocer conoce desde siempre, luz y conocimiento que no quieres abandonar y eres completamente consciente de donde viene y en donde te encuentras en ese momento.

A estos momentos no vas sino que te llevan y te traen como en un abrir y cerrar los ojos estando en vigilia completamente despierto todo pierde el sentido de lo terreno ya no existen normas ni leyes ni comparaciones, a Dios y a su reino no se le limita con leyes absurdas hechas por y para el hombre, estas aquí no valen, aprendamos a ver y pensar en Dios solamente con los limites que el te imponga que no te impone ya que te hizo a su imagen y semejanza, completamente libre, ama a Dios con esa libertad sin reglas ni limites, con amor y solo por amor.

Sigue tu camino

No imites a nadie salvo a Jesús de Nazaret, todo es tan grande e inmenso que no necesita repetir al pies de la letra las experiencias de otros, a cada cual le regala lo que necesita o lo que pueda digerir, por eso todo lo referente a Dios vale y no toda enseñanza del mismo calibre vale para todos, entendamos que Dios esta en todo pero todo no es Dios.

Jesús es Dios y nuestro hermano, sigámosle como cada uno pueda y entienda y que nadie es mas que nadie, los caminos son innumerables, haz tu propio camino y sigue la única regla que no tiene regla: Amas a Dios sobre todas las cosas y a tu prójimo como a Él mismo y olvídate de ti.